Cambiar una bañera por un plato de ducha es una de las reformas más populares en los hogares hoy en día. Esta modificación no solo aporta un diseño moderno y funcional, sino que también mejora la accesibilidad y optimiza el espacio. En esta guía te explicamos paso a paso cómo realizar esta reforma, qué debes tener en cuenta y algunos consejos útiles.
¿Por qué cambiar una bañera por un plato de ducha?
Existen varias razones por las que muchas personas deciden sustituir su bañera por un plato de ducha. Aquí te mostramos algunas de las más comunes:
- Ahorro de espacio: Los platos de ducha ocupan menos espacio, lo que permite aprovechar mejor los metros cuadrados de tu baño.
- Mayor accesibilidad: Ideal para personas con movilidad reducida o para quienes buscan mayor comodidad y seguridad.
- Ahorro de agua: Ducharse consume menos agua que llenar una bañera, lo que te permite reducir el gasto en el recibo del agua.
- Estética moderna: Los platos de ducha tienen un aspecto más actual, minimalista y elegante.
Pasos para cambiar una bañera por un plato de ducha
1. Evaluación del espacio disponible y elección del plato de ducha
Antes de comenzar con la obra, es importante evaluar el espacio que quedará disponible una vez retirada la bañera. Esto te ayudará a decidir el tipo de plato de ducha que mejor se adapta a tu baño.
Tipos de platos de ducha
- Cerámicos: Resistentes y de larga duración, aunque un poco más pesados.
- De resina: Muy populares por su ligereza y su superficie antideslizante.
- Acrílicos: Económicos y fáciles de instalar, aunque menos duraderos que otros materiales.
2. Preparar el área de trabajo
Antes de retirar la bañera, protege el suelo y las paredes del baño con cartones o lonas para evitar daños durante la obra.
3. Desinstalar la bañera
Este paso implica cortar el suministro de agua y desconectar el desagüe de la bañera. Posteriormente, con ayuda de herramientas como una radial o martillo, se procede a retirar la bañera.
Consejo: Si no tienes experiencia en este tipo de obras, lo recomendable es contratar a un profesional para evitar posibles daños en las tuberías o el desagüe.
4. Reparar y nivelar el suelo
Una vez retirada la bañera, es probable que encuentres desniveles en el suelo o huecos. En este caso, será necesario nivelar la superficie para garantizar una instalación correcta del plato de ducha.
5. Instalación del nuevo desagüe
El siguiente paso es instalar un nuevo desagüe adaptado al plato de ducha. Es fundamental asegurarse de que el sistema de desagüe tenga una pendiente adecuada para evitar problemas de atascos en el futuro.
6. Colocación del plato de ducha
Con el desagüe listo, llega el momento de instalar el plato de ducha. Asegúrate de que esté correctamente nivelado para evitar problemas de acumulación de agua. Utiliza un adhesivo específico para platos de ducha para fijarlo al suelo.
Materiales necesarios para la instalación del plato de ducha:
- Cemento cola o adhesivo especial para platos de ducha.
- Sellador de silicona para impermeabilizar las juntas entre el plato y las paredes.
7. Instalar la mampara de ducha
Una vez colocado el plato, se procede a la instalación de la mampara de ducha, que evitará las salpicaduras de agua. Las mamparas de cristal templado son las más recomendadas por su durabilidad y estética moderna.
8. Acabados y revisión final
Finalmente, se sellan todas las juntas entre el plato de ducha, la mampara y las paredes con silicona para garantizar la impermeabilidad. Deja secar el sellador el tiempo necesario antes de utilizar la ducha.
Consejos útiles para cambiar una bañera por un plato de ducha
- Elige materiales antideslizantes: Los platos de ducha antideslizantes son más seguros, especialmente para personas mayores o con problemas de movilidad.
- Apuesta por una buena mampara: Una mampara de calidad no solo mejora la estética del baño, sino que también previene fugas de agua.
- Revisa las tuberías: Aprovecha el momento para revisar el estado de las tuberías y el sistema de desagüe, y realiza las reparaciones necesarias.
- Mantén una buena ventilación: Asegúrate de que tu baño tenga una ventilación adecuada para evitar problemas de humedad.
Beneficios de cambiar una bañera por un plato de ducha
Cambiar una bañera por un plato de ducha no solo mejora la estética de tu baño, sino que también ofrece muchos otros beneficios. Aquí te los resumimos:
- Mayor seguridad: Los platos de ducha son más accesibles y reducen el riesgo de caídas.
- Ahorro económico: Al reducir el consumo de agua, también ahorrarás en la factura.
- Facilidad de limpieza: Los platos de ducha son más fáciles de limpiar que las bañeras, lo que supone menos esfuerzo en su mantenimiento.
- Mayor espacio: Un plato de ducha deja más espacio libre en el baño, lo que es ideal para baños pequeños.
Preguntas frecuentes sobre cambiar una bañera por un plato de ducha
El costo de cambiar una bañera por un plato de ducha puede variar dependiendo del tipo de plato que elijas, los materiales adicionales y la mano de obra. El precio promedio suele estar entre 600€ y 1.500€.
El tiempo de trabajo depende de la complejidad de la obra, pero por lo general, un profesional puede completar el cambio en 2 o 3 días.
No siempre es necesario, pero es recomendable revisar el estado de las tuberías y realizar cambios si se detectan problemas como oxidación o fugas.
Si bien no es una obra extremadamente compleja, requiere conocimientos sobre fontanería y construcción. Si no tienes experiencia en estas áreas, lo mejor es que contrates a un profesional.
Los platos de ducha de resina son una de las mejores opciones gracias a su resistencia, su superficie antideslizante y su diseño moderno. Además, son fáciles de instalar.